Comenzaba la década del cincuenta del siglo pasado, cuando un grupo de agricultores espejeños vio como sus cosechas de aceitunas quedaban atrapadas en la quiebra de una fábrica de aceite local.
Como salida a la situación se acordó quedarse con las instalaciones como forma de pago. Aquí nació la que hoy conocemos como “Almazara San Bartolomé SCA”.
Durante los primeros años de andadura esta sociedad se nos presenta bajo el nominal de su presidente “Don Victoriano Pavón Márquez. Fábrica de Aceite”.
Es en Diciembre de 1.965 cuando se constituye el “Grupo Sindical de Colonización” cuyo objeto social, según recoge el acta de constitución es “realizar la transformación o comercialización de los productos del olivar y cereal, adquisición de maquinaria agrícola, construcción o adquisición, mejora y explotación de las industrias necesaria para transformar los productos agrícolas”, con presidente Don Victoriano Pavón Márquez.
Son cincuenta años desde que la cooperativa adquirió forma societaria, que más tarde sería SAT San Bartolomé, aunque siempre ha sido conocida por “El Bloque” y “La Molina”.
En los últimos años de esta etapa, el presidente delegó en Don Juan Antonio Pavón Márquez y después en Don Rafael Córdoba Romero.
Estamos en 1.969 cuando se elige a Don Jesús Luque López para la presidencia. Durante su mandato, la Asamblea, reunida en Enero de 1.980 acuerda el traslado de las instalaciones, ya que el volumen de molturación crecía y la ubicación dentro del casco urbano hacía necesario afrontar un nuevo proyecto lleno de ilusión, pero también de sacrificios para acometerlo. La campaña 81/82 del siglo veinte fue molturada en la nueva sede.
Don Justino Criado Gracia accede a la presidencia en 1.988, y va a ser bajo su mandato, en la década de los noventa, cuando se adopten dos importantes decisiones que marcaran el futuro de la sociedad.
En 1.990 se acuerda abandonar el sistema tradicional de producción y se monta la Piralisis Jumbo 3, con capacidad de molturación de 80.000 a 100.000 Kg. de aceituna al día.
Comienza así una renovación tecnológica que al día de hoy sigue siendo unos de los objetivos sociales.
En 1.993 otra gran decisión fue adoptada: La Sociedad Agraria de Transformación San Bartolomé, número 2.573, se transforma en Almazara San Bartolomé SCA.
Don José Reyes Lucena ostenta la presidencia en 1.997, eligiéndose en Julio de 1.998 a Don Antonio Reyes Pérez como presidente.
Los kilos de aceituna aportados por los socios han ido creciendo de forma exponencial durante estos años, el mercado del aceite ha experimentado una transformación total, y ante esta realidad la asamblea decide incorporar la sociedad cooperativa a la de segundo grado Hojiblanca, entonces, hoy Dcoop, con vistas a una unión más fuerte entre productores y una mejor comercialización, molturándose la campaña 2010/2011 dentro de esta organización.
Solo hay que comparar la molturación de la campaña 1988/1989, 1.840.004 Kg. de aceituna, con la llevada a cabo en la campaña 2013/2014, con un montante de 7.784.774 Kg. de aceituna, es decir, un 423% más, para poner de manifiesto la expansión de la cooperativa.
Tras casi sesenta y cinco años de andadura, hoy San Bartolomé SCA es una empresa más que consolidada, puntera en la búsqueda de la calidad, formada por un grupo de socios, a cuyo frente está Don Lorenzo Pérez Herencia desde el 2012, que unen a la profesionalidad necesaria actualmente la solera heredada de los viejos labradores.
Si durante toda la trayectoria de la sociedad hemos destacado a sus presidentes y socios, no se pueden olvidar la labor realizada por las personas que han estado a cargo de la molturación y han cuidado la bodega: Don Celedonio Romero, Don José Mª López Lucena, Don Antonio Adrián Reyes y, el actual, Don Marcial Jurado Mármol.
Todos los hombres y mujeres que han sido y los que son parte de San Bartolomé, con ganas y sacrificio, han conseguido el reconocimiento público de su aceite. Y eso es para felicitarse.